El sector inmobiliario es uno de los más prósperos y que dejan magníficas ganancias y por ello también un sector en el que muchos piensan en hacer fraude y ganar dinero fácilmente.
Entre anuncios falsos de renta de inmuebles, correos electrónicos falsos de notarios, estafas de préstamos inmobiliarios. Hasta la suplantación de identidad.
La estafa o fraude inmobiliario puede afectar tanto a los anuncios inmobiliarios de renta de temporada como a la población estudiantil, o futuros compradores de inmuebles, terrenos, etc.
Los delincuentes de estas estafas de alquiler o venta de inmuebles son más comunes en Internet y pueden ser los llamados propietarios fantasmas, promotores falsos o agentes inmobiliarios, piratas informáticos. Pueden llegar a hacerse pasar por agencias bancarias, inmobiliarias, o notarios.
Indicadores de un fraude inmobiliario
Los iniciadores de estos fraudes inmobiliarios suelen operar desde el extranjero. Esto hace que la situación sea compleja. Su objetivo puede ser el dinero, pero cada vez más el robo de identidad.
Principales razones que deben alertarte son las siguientes:
- Un precio de venta o alquiler demasiado atractivo en comparación con el precio de mercado.
- La dirección exacta de la propiedad no será comunicada en el sitio o no informada inmediatamente después de la solicitud.
- Números de teléfono no proporcionados.
- Una solicitud de dinero antes de visitar y firmar el contrato. Se pide que pagues un depósito.
- Cualquier solicitud de información personal o documentos personales (DNI, datos bancarios, factura, nómina, comprobante de domicilio, etc.) antes de visitar el inmueble y firmar el contrato.
- La persona detrás del anuncio está en el extranjero.
Prácticas para evitar una estafa inmobiliaria
Si te interesa realizar alguna transacción inmobiliaria con algún bien inmueble, estas son las buenas prácticas que debes adoptar para evitar los fraudes inmobiliarios:
- Consultar sistemáticamente con mapas de Google la ubicación del inmueble en renta o venta (o de la sucursal bancaria, en caso de solicitud de préstamo).
- En el caso de una compra o alquiler, ve al sitio incluso antes de la cita de visita. Inspecciona el barrio, la fachada, habla con el vecino, etc.
- Sistemáticamente ten el reflejo de la llamada telefónica. Unos segundos de conversación cara a cara pueden ser suficientes para darte cuenta de que se trata de un estafador.
- Realiza tu investigación, lee reseñas/comentarios de situaciones similares.
- Haz una búsqueda desde Google sobre el interlocutor.
- Usa tu pensamiento crítico, presta atención al comportamiento, los errores de ortografía, el vocabulario utilizado, el diseño de los correos electrónicos recibidos.
- Nunca envíes una copia de un documento de identidad, tus datos bancarios o cualquier otro documento personal antes de visitar una propiedad y firmar el contrato.
- Nunca envíes dinero como depósito antes de la cita de visita y la firma de un contrato.
Finalmente, hoy en día, la única solución que existe para detectar una estafa inmobiliaria de renta, venta o hipoteca sigue siendo la prevención.
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